Forma parte de la enorme planicie que conforma la Península de Yucatán, la cual comparte con este estado y con Quintana Roo. Fue habitado por grupos de la milenaria cultura maya, de la que hoy se ven sus huellas en sitios como Edzná y Calakmul. A orillas del Golfo de México, en lo que fuera la ciudad maya de Ah Kin Pech (“lugar del sol”), Francisco de Montejo el Mozo dispuso la fundación de la Villa de San Francisco de Campeche.
Debido a la estratégica ubicación de su capital, ésta fue foco de innumerables incursiones piratas, por lo que se construyó un sistema defensivo de murallas y fuertes, del que aún se observan vestigios y que le dan su carácter distintivo. El entorno del estado es tropical, y a diferencia de sus vecinos de la península, el territorio campechano cuenta con varios ríos, además de playas, sitios arqueológicos, edificios coloniales, haciendas decimonónicas y reservas naturales que albergan flora y fauna diversa.
México guarda una extensa historia en sus selvas más profundas, siendo Calakmul una de las más importantes y desconocidas por el turista. Localizada dentro de una zona de 331 mil hectáreas, contenedora de más de 38 zonas arqueológicas, nos ofrece una terreno lleno de misterios y un pasado por descubrir. Desde 2014, la UNESCO lo nombró Patrimonio Mundial de la Humanidad, debido a que es la principal reserva natural de Mesoamérica y la segunda más grande de América.